Aportan fluidez y luminosidad y transmiten energías positivas según el feng shui, una de las filosofías orientales más antiguas y respetadas. Los espejos han abandonado la seguridad del cuarto de baño, para colonizar otros espacios del hogar y convertirse en un must-have de la decoración. Y es que además de elevar la claridad y acentuar la sensación de profundidad, estos objetos son poderosos aliados de la armonía y el bienestar para el taoísmo.
En concreto, el uso de espejos en la entrada de la casa según el feng shui ayuda a transformarla en un espacio sereno y saludable. Debido a malas prácticas que todavía imperan, no fueron pocos los interioristas que desaconsejaban en el pasado la colocación de espejos en el recibidor, el mismo espacio que hoy pocos conciben sin este complemento —eso sí, reuniendo una serie de requisitos.
¿Qué significan los espejos en feng shui y por qué usarlos en la entrada de la casa?
En arquitectura y decoración, las reglas del feng shui persiguen la búsqueda de equilibrio entre el individuo y su espacio vital, sosteniendo su corpus de creencias en las energías positivas y negativas que circulan a nuestro alrededor. Sin avalar ni contradecir lo anterior, las enseñanzas de esta filosofía milenaria pueden aplicarse con provecho en múltiples áreas del interiorismo; por ejemplo, en la decoración de recibidores.
Para el feng shui, ¿qué significa un espejo en la entrada? Este objeto reflectante se asocia con el elemento agua, de los cinco existentes (tierra, metal, madera y fuego), y presenta una serie de cualidades muy definidas: la comunicación, la nitidez, la claridad, la fluidez y la luminosidad.
Por su capacidad para duplicar el entorno, los espejos son bienvenidos en recibidores pequeños. Sabiamente colocados, agregan metros cuadrados al espacio de forma ilusoria. No obstante, el feng shui advierte del error que supondría situarlo frente a la puerta principal y permitir que las energías negativas y positivas se mezclasen. Se instalarán preferiblemente en las paredes laterales. Respecto a la utilidad de los espejos en pasillos en feng shui, logra que la energía fluya más despacio. Las lámparas también serían eficaces en este sentido.
De acuerdo con este sistema oriental, cada mueble, adorno y objeto de la vivienda se identificaría con uno de esos elementos. Las relaciones son bastante lógicas: una pared de ladrillo visto se identificaría con la tierra, unas velas con el fuego, etcétera. En el caso particular del agua, interesa rodear el espejo de objetos que también se identifiquen con el elemento acuoso.
Entre los objetos compatibles con el espejo, destacan los jarrones, esculturas y otros adornos de formas orgánicas e irregulares, los cuadros que representen mares, océanos o ríos; los acuarios y peceras, y las paredes de color azul. Esto da mucho juego en el resto de la vivienda, al saber cómo disponer los espejos en escaleras según el feng shui.
Cómo decorar la entrada con espejos según el feng shui
Y hasta aquí, una síntesis de las enseñanzas del feng shui sobre los espejos en el recibidor. Pero esta teoría no es fácil de llevar si se desconocen ciertos principios de decoración e interiorismo. Por su vínculo con el elemento agua, es importante cuidar el diseño del espejo. Las formas redondas, ovaladas u orgánicas resultan apropiadas, pues la naturaleza desconoce las líneas rectas. En tiendas y grandes superficies es fácil encontrar espejos modernos y elegantes que respondan a estas características.
Como se ha mencionado, un espejo mal orientado supone, conforme al feng shui, un punto de fuga para las energías positivas. De ningún modo deberá instalarse un espejo frente a la puerta de entrada. Además de la sensación extraña e incluso sorpresiva que conlleva para el visitante, esta ubicación es desafortunada porque el Chi (flujo de energía vital, según el taoísmo) rebotaría en el reflejo en vez de entrar libremente.
Pero el feng shui no entra en conflicto con tendencias actuales, como los espejos en gran formato. Al decorar el recibidor de una casa, apoyar un espejo grande en una de las paredes laterales dará un toque espontáneo a la entrada, rompiendo así con el exceso de orden y simetría del que pecan algunos recibidores. No obstante, si el espacio es demasiado angosto o básicamente se reduce a un pasillo, instalar un espejo de estas dimensiones tenderá a saturar el ambiente, con el riesgo añadido de generar problemas de tránsito.
Por sus cualidades reflectantes, el espejo proyecta su entorno inmediato. Arroparlos bien —es decir, rodearlos de adornos, textiles y muebles apropiados— es una decisión inteligente, como recomiendan los servicios de interiorismo y decoración. Y debe evitarse los collages de espejos diminutos, tan populares en las colecciones de Pinterest, que transmiten la imagen simbólica de un espejo roto, efecto del todo indeseable.