La decoración vegetal está cada vez más presente en hogares, comercios y oficinas. Además de refrescar el ambiente y reducir el CO2, las plantas dotan a su entorno de una paleta de colores en la que predominan el verde y sus tonalidades, con toques de amarillo, rojo y blanco en especies concretas y si la floración acompaña.
Pero sacar partido de sus beneficios es más fácil de decir que de hacer. El diseño de interiores con plantas no forma parte del quehacer de los interioristas por casualidad. Saber cuáles utilizar, dónde colocarlas y cómo inundar cada espacio con su verdor, sin saturar el ambiente, puede ser un desafío.
5 recomendaciones sobre diseño de interiores con plantas naturales
¿Sabías que la presencia de plantas en casas ayudó psicológicamente a sobrellevar el confinamiento causado por el Covid-19? Según un estudio de la Universidad de Sevilla (US), publicado en la revista Urban Forestry and Urban Greening, el poder de la naturaleza trasciende su valor ornamental, actuando sobre el bienestar y la felicidad del ser humano.
Si desconoces qué plantas para diseño de interiores elegir o dónde situarlas para sumar en vez de restar a la decoración, las siguientes líneas te interesan:
Las especies, según la orientación del inmueble
Las plantas compatibles con interiores comprenden un vasto catálogo, con cientos y cientos de opciones. Su elección está subordinada no sólo al gusto del interesado, sino también a las características de su vivienda. La orientación de la propiedad es un aspecto fundamental.
Los inmuebles orientados al este, por ejemplo, reciben luz solar durante la mañana, mientras que la misma escasea por la tarde. El unicornio y el cáñamo de arco son especies perfectas en este caso. Por su parte, si la casa o las habitaciones apuntan al oeste, la luz matutina será pobre mientras que el resto del día recibirá una exposición solar más directa. Por su resistencia, las suculentas, los cáctus y la venus atrapamoscas serán apropiadas en estas condiciones.
En las viviendas orientadas al sur, el diseño de interiores con plantas naturales debe adaptarse igualmente, pues el número de horas de sol será alto, sobre todo en verano. Solo las especies más resistentes deberían ser consideradas, y ocasionalmente habrán de protegerse a la sombra. No obstante, se recomienda evitar mudarlas de lugar con demasiada regularidad, pues estos seres vivos sufren experimentan un pequeño shock y se debilitan durante semanas si el cambio es drástico.
Más que texturas y colores, símbolos
Las plantas dan color y vivacidad y diversifican las texturas de salones, dormitorios y otras estancias. Pero también encierran símbolos que se han transmitido desde la antigüedad, como la asociación del helecho con la fortuna, la armonía o la paz. Por su parte, la lavanda se relaciona con la serenidad, algo lógico considerando que sus aceites esenciales se emplea para combatir la ansiedad.
Al decorar con plantas la entrada de casa, el árbol de jade es una especie con un simbolismo interesante: la prosperidad y la amistad. A las personas de espíritu romántico, en cambio, les atraerá más el clavel, por su vinculación con el amor.
Aromas que realzan su entorno
Pero las plantas no sólo alegran la vista: también pueden ser un deleite para el sentido del olfato. El particular aroma de cada especie no suele tenerse en cuenta en decoración, pese a que el bambú, la sansevieria o el espatifilo absorben la humedad y purifican el ambiente del baño.
Son apropiadas para la cocina las plantas con una fuerte vinculación con la gastronomía, como la menta, el orégano o la albahaca: no sólo embellecen este entorno, sino que saborizan la comida. Por su parte, el dormitorio se beneficia más de especies como la lavanda, por los efectos relajantes de su aroma.
Cualquier espacio libre es una oportunidad
Al decorar con plantas el salón y otras estancias, el aprovechamiento del espacio es crucial. Los rincones muertos son fáciles de ‘revivir’ con ayuda de una maceta de ficus lyrata, anturio rojo o monstera deliciosa. Este enfoque, clave para decorar áticos, se basa más en aprovechar cada metro cuadrado que en rellenarlo por rellenarlo.
En habitaciones de techos altos suelen habilitarse multitud de espacios donde los tiestos y maceteros verticales brillarían con luz propia. Los huecos de las estanterías, las vigas y otras superficies son una oportunidad de situar esa planta predilecta a la que no encontramos otro asentamiento más adecuado.
Cuanto más grandes, ¿mejor?
Atreverse con la decoración vegetal no significa pensar en pequeño. De hecho, se estilan cada vez más los ejemplares grandes: el castaño de Guayana, el tronco de Brasil, la drácena marginata, la euphorbia ingens, el ave del paraíso y un largo etcétera de plantas grandes de interior, que aportarán carácter y personalidad a su entorno. Pero se recomienda no excederse. Se corre el riesgo de caer en un absurdo gigantismo que convierta el salón en un invernadero.